Sistemas de asistencia a la conducción cada vez más avanzados

19 de enero de 2024

El gran desafío técnico y legislativo que supone el salto desde los asistentes de conducción avanzados de nivel 2 hasta los niveles de conducción parcial o totalmente autónomos quedó mucho más consolidado tras la aprobación en enero de 2021 de la actualización de la regulación UE R157 sobre los sistemas de mantenimiento de carril avanzados. La industria europea abrió así la puerta al nivel de conducción 3, con sistemas de asistencia que permiten liberar la atención de la carretera. Los avances tecnológicos en la automoción continúan y ahora los fabricantes incorporan nuevos sistemas nivel de conducción 2+.

Alemania fue el primer país en contemplar la comercialización de vehículos con asistentes de conducción de nivel 3. Sólo disponibles en vehículos con un nivel de equipamiento muy elevado, y habilitado para funcionar en determinadas carreteras, estos sistemas permiten distraerse de la conducción para realizar otras tareas, siempre y cuando se garantice que el conductor está disponible para tomar el control en cada momento. Sin embargo, el avance hacia este este tipo de sistemas supone un gran salto tecnológico que pocos fabricantes, todavía a día de hoy, pueden permitirse.

Las nuevas tecnologías están permitiendo a los fabricantes ensayar con la experiencia de uso y de compra de los sistemas opcionales que disponen sus vehículos.

Aun así, la tecnología no deja de mejorar y ahora aparecen nuevos sistemas clasificados como nivel 2+, es decir, sistemas de conducción de nivel 2, pero un poco más avanzados. Más concretamente, Ford ha sido el primer fabricante en España en homologar este tipo de sistemas con su Mustang Mach E, quien con su sistema Blue Cruise permite, en determinados tramos de autopistas y autovías, conducir el vehículo sin necesidad de mantener las manos en el volante. En todo momento el conductor debe estar prestando atención a la carretera de modo que pueda hacerse con el control del vehículo en cualquier momento. Ya está disponible por suscripción desde este mes de octubre.

Mantener la atención

Estas funcionalidades de nivel 2+ no permiten que el conductor realice tareas ajenas a la conducción, por lo tanto, siguen siendo de nivel 2, pero sí que permiten reducir todavía más la fatiga y mejorar el confort respecto a un sistema de nivel 2 estándar. Algo muy interesante y que se debe valorar muy positivamente como una mejora de la seguridad vial.
Desde la llegada de los sistemas avanzados más mejorados hace aproximadamente una década, que ofrecen niveles de asistencia superiores, se han ido publicando algunas noticias en las que se sucedían distintos accidentes con vehículos donde los conductores decidían desentenderse totalmente de la conducción provocando graves accidentes, en muchos casos, lamentablemente mortales. La industria debe ser muy prudente a la hora de comunicar a sus conductores cómo funcionan los sistemas que incorporan sus vehículos y los usuarios debemos recordar que en cualquier momento pueden requerir que reaccionemos ante cualquier irregularidad.

Avances en los sistemas de conducción de nivel 3

La penetración de los sistemas de nivel 3 en el parque móvil europeo seguirá siendo previsiblemente a corto plazo todavía muy escasa. Requieren de un volumen mayor de sensores y con un nivel superior a los que podemos encontrar en vehículos convencionales. Asimismo, la tecnología de computación es mucho más avanzada para permitir reconocer correctamente el entorno y tomar decisiones en tiempo real. Todo ello parece indicar que este tipo de sistemas puede tardar en popularizarse entre los vehículos más generalistas disponibles en el mercado.
A nivel legislativo, el reglamento UN R157 incorporó una nueva actualización en marzo de este año en la que se amplía la velocidad de operación de estos sistemas desde 60 km/h hasta 130 km/h, permitiendo así un uso a velocidades de autopista. Esto implica que probablemente nuevos fabricantes incorporen sistemas mejorados a medida que el nivel de desarrollo lo permita y los países adapten su legislación.

Innovación en la experiencia de uso

Las nuevas tecnologías están permitiendo a los fabricantes ensayar con la experiencia de uso y de compra de los sistemas opcionales que disponen sus vehículos.
El vehículo conectado permite ofrecer no sólo servicios de entretenimiento por suscripción sino, incluso, sistemas de seguridad y de asistencia avanzados, pudiendo pagar una cuota mensual mientras se desee usar el servicio y no comprometerse teniendo que tomar la decisión en el momento de la compra del vehículo o limitar las opciones del vehículo al comercializarlo en ese momento. Algo que, sin duda, tendrá una buena acogida si los servicios ofrecidos aportan valor añadido a los usuarios y permiten mantener el vehículo con unos buenos niveles de seguridad incorporando este tipo de opciones.
La industria del automóvil se venía viendo históricamente como una gran industria muy consolidada y con muy poco margen para incorporar innovaciones en sus productos y relaciones con usuarios y conductores; en la actualidad la situación es totalmente diferente. El enorme potencial que tienen las tecnologías de conducción autónoma, la electrificación y la conectividad de los vehículos está permitiendo desde nuevas formas de comprar y disfrutar los vehículos hasta mantenerlos más actualizados y seguros con la incorporación paulatina de nuevas mejoras en los sistemas de seguridad.