Puntos imprescindibles que hay que revisar para que el coche esté listo para el invierno
Norauto enumera los puntos clave que hay que revisar, además de consejos prácticos, también si el coche es híbrido o eléctrico.
A las bajas temperaturas propias de esta estación, hay que sumar las condiciones climatológicas adversas como lluvia, viento, nieve o hielo, que reducen la visibilidad y el agarre. Con la llegada del invierno, es crucial preparar el vehículo para garantizar la seguridad y evitar averías costosas. Norauto, la cadena de mantenimiento integral del automóvil, enumera los puntos clave que hay que revisar ante esta estación.
1-Neumáticos: “Las bajas temperaturas hacen que el caucho de los neumáticos de verano se endurezca y pierda parte de sus prestaciones, reduciendo drásticamente el agarre y la tracción, especialmente en asfalto mojado, nevado o helado”, indica Xavier Celda, responsable de Mercado de Taller de Norauto. Por ello, unos neumáticos adecuados o en buen estado (con la profundidad de dibujo correcta) y con la presión óptima garantizan una distancia de frenado más corta y una mejor maniobrabilidad, previniendo el riesgo de aquaplaning. Hay que recordar que por debajo de 7°C se recomiendan los neumáticos de invierno.
La compañía recuerda que la profundidad del dibujo de la banda de rodadura no debe ser inferior a 1,6 mm, aunque se recomienda no bajar de 3 mm, sobre todo con suelo mojado.
2-Batería: “Las bajas temperaturas reducen su capacidad de retener carga y hacen que el arranque del motor sea más exigente, ya que el aceite está más denso”, apunta Xavier Celda. Una batería revisada (con bornes limpios y buen voltaje) asegura el arranque correcto del coche y que todos los sistemas eléctricos (luces, calefacción, limpiaparabrisas) funcionen correctamente bajo el uso intensivo que requiere el invierno.
Desde Norauto recomiendan realizar un diagnóstico para saber cuál es el estado de la batería y demás componentes del circuito de arranque y carga.
3-Líquido anticongelante/refrigerante: El anticongelante puro tiene un punto de congelación muy bajo y un punto de ebullición alto. Si el nivel es bajo o se usa agua, el líquido puede congelarse en el circuito interno del motor cuando la temperatura exterior cae bajo cero. Esto podría provocar la rotura de la bomba de agua o graves daños internos en el motor. Es importante que se mantenga a una temperatura óptima, protegiendo así el sistema de refrigeración de las heladas y de la corrosión.
4-Sistemas de luces: Es importante que todas las luces funcionen correctamente ya que en invierno se reducen las horas de luz y, por lo tanto, la visibilidad se ve comprometida. A esto hay que añadir la lluvia, la niebla o la nieve. Tener todas las luces funcionando (cortas, largas, antiniebla, posición y freno) es crucial para detectar obstáculos a tiempo y reducir el riesgo de colisión.
5-Limpiaparabrisas (escobillas y líquidos): Las escobillas desgastadas no limpian bien la suciedad, el barro o el hielo, dejando franjas que limitan la visibilidad. Además, si se utiliza líquido de verano, este puede congelarse en el depósito, la bomba o los conductos, inutilizando el sistema. Desde Norauto se recomienda cambiar a un líquidolimpiaparabrisas con aditivos anticongelantes y usar escobillas en buen estado que garanticen una limpieza eficaz del parabrisas, eliminando escarcha y sal.
6-Sistema de calefacción y desempeñado: Su buen funcionamiento es importante para mantener una temperatura óptima en el interior del vehículo, mejorando el confort y evitando que los cristales se empañen impidiendo la visibilidad.
7-Frenos: La lluvia, la nieve y el hielo ponen a prueba el funcionamiento de los frenos. De su buen estado depende, en parte, que el vehículo se detenga correctamente siempre que sea necesario.
Seis consejos importantes y prácticos en invierno
1-Procurar estacionar el vehículo en un recinto cerrado por la noche como puede ser un garaje para evitar al máximo las bajas temperaturas. Si esto no es posible, se recomienda cubrirlo con fundas específicas, sobre todo en las noches más frías.
2-No dejar estacionado el vehículo durante tiempos prolongados, ya que esto también afecta a la batería y al resto del sistema electrónico del vehículo. Norauto recuerda que es recomendable circular con frecuencia con el vehículo para que todos los sistemas se pongan en funcionamiento.
3-Con las cadenas en el maletero. Se recomienda llevar en el automóvil todo aquello que pueda ser necesario en invierno. Un ejemplo son las cadenas de nieve, especialmente si se circula por montaña o en lugares propensos a tener nevadas. También es necesario llevarlas en caso de previsiones. Norauto recuerda que es muy importante colocarlas correctamente (aquí se ofrecen una serie de consejos para instalarlas correctamente). Las cadenas de nieve son fundamentales para conducir con nieve si no se cuenta con neumáticos de invierno o neumáticos all season. En este sentido, las textiles son más fáciles de instalar y, por lo tanto, se evitan errores.
4-Listos para quitar el hielo del parabrisas que muchos conductores se encuentran por las mañanas. Aquellos vehículos que permanecen estacionados en la calle, amanecerán cubiertos de hielo. Para eliminarlo, se aconseja utilizar un descongelador de parabrisas específico junto a una rasqueta de plástico.
Desde Norauto destacan la importancia de no rascar el cristal con nada metálico porque se puede dañar la luna. Tampoco es recomendable echar agua caliente sobre el cristal porque el cambio de temperatura puede romperlo. Ni echar sal porque araña el parabrisas.
5-Escobillas sin contacto con el parabrisas durante la noche si se estaciona en la calle. Las bajas temperaturas pueden hacer que las escobillas se queden pegadas al cristal por el frío. Por ello, desde Norauto se aconsejacolocar una sábana, cartón o una semi funda que cubra todas las ventanillas, dejando por encima los limpiaparabrisas.
6-Dejar el motor arrancado durante unos segundos antes de iniciar la marcha. De esta forma, todos los líquidos circulan y el vehículo coge la temperatura óptima.
Atención también a los coches híbridos y eléctricos
Este tipo de automóviles tienen unas características específicas: el frío afecta de forma particular al sistema de baterías y la autonomía.
-La batería de tracción es sensible al frío: En climas fríos, la capacidad de la batería principal se reduce. Esto se traduce en una disminución de la autonomía y una recarga más lenta, ya que el vehículo consume energía extra para mantener la batería en su temperatura óptima de funcionamiento.
-Pre-Climatización: Se recomienda pre-climatizar el habitáculo (poner la calefacción) mientras el coche aún está conectado al punto de carga. Así, el consumo de energía para calentar el coche procede de la red eléctrica y no de la batería del vehículo, conservando su carga para la conducción.
-Carga en zonas templadas: Siempre que sea posible, cargar en garajes o zonas cubiertas, ya que las temperaturas más templadas favorecen una carga más eficiente.
Por último, desde Norauto se destaca la importancia de realizar un mantenimiento adecuado del vehículo de forma periódica, especialmente antes de emprender un viaje o ante condiciones climatológicas desfavorables.
