Vehículo Eléctrico
Características especiales de la carrocería
La carrocería es un componente clave en el diseño y fabricación de vehículos eléctricos y juega un papel crucial en su rendimiento, seguridad y eficiencia.
A diferencia de los vehículos con motores de combustión interna, las carrocerías de los coches eléctricos deben adaptarse a las particularidades de la propulsión eléctrica, como la ubicación de la batería, la ausencia de un motor voluminoso y la necesidad de optimizar la aerodinámica.
En este artículo se exploran las características más destacadas de las carrocerías de los coches eléctricos, sus ventajas y cómo han influido en la evolución de la movilidad eléctrica.
Distribución del peso y centro de gravedad bajo
Una de las características clave de las carrocerías de los coches eléctricos es la ubicación baja del centro
de gravedad, lograda principalmente gracias a la colocación de la batería en el piso del vehículo. La batería, el componente más pesado del coche, se integra en la parte inferior de la plataforma, lo que ofrece importantes beneficio.
- Mejor manejo y estabilidad: Con el peso distribuido uniformemente y ubicado cerca del suelo, el coche tiene una menor tendencia a volcarse en curvas cerradas o maniobras bruscas.
- Conducción más dinámica y deportiva: Un centro de gravedad bajo mejora la respuesta en la dirección y la dinámica del vehículo, lo que se traduce en un comportamiento más ágil, aunque los vehículos eléctricos suelen ser más pesados debido a las baterías.
Plataforma modular y flexible
En la fabricación de vehículos eléctricos, es cada vez más común utilizar plataformas modulares y escalables, como la plataforma MEB (plataforma modular de propulsión eléctrica) de Volkswagen. Estas permiten a los fabricantes desarrollar una gama diversa de modelos sobre una misma base.
- Flexibilidad para diferentes segmentos: Las plataformas modulares facilitan la adaptación de la longitud, distancia entre ejes y capacidad de la batería según el tipo de vehículo (sedán, SUV, etc.), optimizando los costes de producción.
- Compatibilidad con diferentes configuraciones: Estas plataformas permiten cambios sencillos en la
ubicación de los motores eléctricos, admitiendo configuraciones de tracción delantera, trasera o en las cuatro ruedas.
Las carrocerías de vehículos eléctricos optimizan el espacio interior y el centro de gravedad, mejorando así el manejo y la estabilidad en cada trayecto.
Maximización del espacio interior
La ausencia de un motor de combustión interna y de otros componentes mecánicos voluminosos como el sistema de escape y la transmisión, otorga una mayor libertad en el diseño de la carrocería. Esto permite aprovechar mejor el espacio interior.
- Aprovechamiento de la arquitectura “plana”: En muchas plataformas de coches eléctricos, como las
utilizadas por Tesla y Volkswagen, la batería se coloca plana en el piso, lo que elimina el túnel central y aumenta el espacio disponible para pasajeros y almacenamiento.
- Configuración de maleteros duales: La eliminación del motor en la parte delantera permite incorporar un maletero adicional, lo que aumenta la capacidad de carga sin afectar el diseño exterior del vehículo.
Con las plataformas modulares y materiales ligeros, las carrocerías eléctricas reducen el peso y mejoran la eficiencia, potenciando y mejorando la autonomía del vehículo.
Seguridad estructural y protección de la batería
Dado que la batería es uno de los componentes más costosos y críticos de un coche eléctrico, la carrocería debe garantizar su protección ante accidentes. Las plataformas de vehículos eléctricos están diseñadas con refuerzos adicionales para este fin.
- Estructura reforzada: Las carrocerías incluyen zonas de deformación programada que redirigen la energía del impacto hacia áreas menos críticas, reduciendo la probabilidad de daños en la batería. También se añaden refuerzos en los largueros inferiores del estribo para proteger la batería en colisiones laterales.
- Protección contra incendios: Para mitigar los riesgos asociados a un sobrecalentamiento o un cortocircuito en la batería, muchas carrocerías integran medidas de seguridad adicionales, como cortafuegos físicos entre el habitáculo y la batería, así como sistemas de detección temprana de problemas térmicos.
Aerodinámica y reducción de peso
La autonomía de un coche eléctrico depende en gran medida de su eficiencia aerodinámica y su peso. Reducir el peso sin comprometer la seguridad ni la durabilidad es un desafío clave para los fabricantes, que recurren al uso de materiales ligeros y sostenibles.
- Uso de aluminio y materiales compuestos: Para reducir el peso de la carrocería, se utilizan materiales
como el aluminio, que es mucho más ligero que el acero tradicional, sin sacrificar la resistencia estructural. Además, los compuestos de fibra de carbono y otros materiales avanzados también se están utilizando en zonas estratégicas de la carrocería.
Diseño y seguridad avanzados: las carrocerías de los vehículos eléctricos protegen la batería, asegurando durabilidad y resistencia ante posibles colisiones o impactos.
- Reducción de piezas y simplificación de ensamblaje: Tecnologías como el “Gigacasting” implementado por Tesla permiten fabricar grandes componentes de la carrocería en una sola pieza de aluminio fundido, lo que disminuye significativamente el número de piezas que requieren soldadura y ensamblaje, reduciendo tanto el peso del vehículo como la complejidad del proceso de fabricación.
- Diseño aerodinámico optimizado: La ausencia de un motor de combustión permite un diseño más aerodinámico, con un frontal más bajo y menos elevado. Además, los coches eléctricos suelen tener suelos planos, lo que reduce la resistencia al aire y mejora la eficiencia, ayudando a maximizar la autonomía.
Conclusión
Las carrocerías de los vehículos eléctricos han evolucionado significativamente para adaptarse a las exigencias de la movilidad eléctrica moderna. Con un diseño centrado en la eficiencia aerodinámica, el uso de materiales ligeros y reciclables, y el aprovechamiento del espacio interior, las carrocerías de los vehículos eléctricos ofrecen soluciones innovadoras tanto en términos de funcionalidad como de seguridad.
La protección de la batería y la integración de tecnologías avanzadas son elementos clave que permiten
a los vehículos eléctricos destacar frente a los tradicionales. Ante los continuos avances tecnológicos, es
previsible que surjan aún más innovaciones en este campo concreto.